Optimizar los procesos de recuperación para maximizar la adaptación al entrenamiento y minimizar el riesgo de lesión, a través de estrategias de descanso, nutrición, movilidad y detección precoz de problemas.
El sueño es el factor más crítico para la recuperación: no solo repara músculos y tendones, sino que consolida patrones motores y regula hormonas clave para la adaptación.
Introduce tu hora de despertar y ciclos de 90 min para saber a qué hora debes acostarte:
Ejercicios activos para “calentar” articulaciones y activar receptores propioceptivos antes de cargas intensas.
📌 Objetivo: aumentar temperatura y lubricación articular, preparar el patrón de movimiento.
Alargar de forma controlada músculos cargados para mejorar la flexibilidad, reducir rigidez y favorecer el retorno venoso.
Técnica avanzada que combina estiramiento pasivo e isométrico para aumentar el rango de movimiento.
Automasaje miofascial para liberar puntos gatillo y mejorar la circulación.
Elige tu punto muscular y recibe la recomendación óptima (estiramiento, PNF o foam rolling).
Antes de incorporar cualquier suplemento o aplicar técnicas de recuperación, es esencial garantizar la seguridad, pureza y legalidad de los productos y procedimientos utilizados.
Integrar suplementos y técnicas de recuperación de forma inteligente maximiza sus beneficios y minimiza riesgos.
Selecciona tu fase y recibe propuestas de suplemento, dosis y timing: